Si llegaste aquí es por algo. Tranquilo, sabemos que siente gran afición por la marihuana y, ¿adivina qué? ¡Nosotros también!
Cada vez son más las personas que se atreven a probar esta planta, pocos tienen comentarios negativos, puesto que sus bondades medicinales son extraordinarias y para uso recreacional resulta ser muy divertido.
Nos entretuvimos un poco, pero si estás leyendo es porque deseas saber sobre los cultivos de marihuana en interior y solo te podemos decir –por ahora- que prestes atención a lo que viene.
Planifica un cultivo de marihuana en interior
¿Estás pensando en tu primer cultivo de cannabis en interior? Entonces te traemos unos consejos que no podrás pasar desapercibido. Por cierto… ¡Recuerda evitar las plagas!
- Realiza un planning, una estrategia de planificación hará que tengas un trabajo mucho más organizado, así no tendrás que estar pendiente de buscar algunos productos específicos durante el desarrollo del cultivo.
- Determina el emplazamiento del cultivo, claramente, uno de los pasos más importantes es el emplazamiento del cultivo, es decir, el lugar. Lo idóneo es que el recinto posea las siguientes características 1,20 m2 o 1m2 al igual que una potencia de 600w.
- Instrumentos necesarios, uno de los instrumentos primordiales cuando se trata de cultivo de marihuana en interior es un armario de cultivo, con esto sumado y sumado a las características anteriores podrás iniciar con el cultivo y obtener una producción adecuada.
- Lámparas, como sabes las plantas de marihuana necesitan buena iluminación, puesto garantiza la buena cosecha. Por tal razón, te recomendamos que adquieras lámparas de primera calidad. En este caso, puedes optar por lámpara de alta tecnología como las LED.
- Ventaja del armario cultivo, insistimos en el armario de cultivo porque es una herramienta básica. En primer lugar permite un cultivo fácil y ayuda a optimizar las temperaturas, humedades y evita la entrada de luz del exterior. Con un armario no tendrás que verte en la necesidad de abrir huecos en la pared.
Consejos para el cultivo de marihuana en interior
El mundo está entendiendo que la marihuana es la salida para muchos problemas en la salud, esta razón ha hecho que un gran número de personas opte por cultivar el cannabis en casa. Sabemos que tú mayor deseo es cultivar en casa, por te enseñaremos a cómo cultivar marihuana en interior. ¿Lo mejor? Es que es especial para novato, no te preocupes, te guiaremos al éxito.
1. ¿Cuántas plantas cultivar y qué tipo de maceta usar?
Si tienes la duda sobre cuántas plantas cultivar, te contamos que no hay una receta específica, ni tampoco ningún tipo de regla.
Algunos expertos opinan optar por la opción SOG, Sea of Green, donde se aprovechar en gran medida la superficie del lugar del cultivo, mientras que otros se afincan por SCROG, Screen of Green, una técnica que asimila al máximo la producción de cannabis por medio de los armarios de cultivo y pocas plantas. Por último, hay un grupo que prefiere el cultivo convencional.
Asimismo, existe un gran número de opiniones sobre el sistema de cultivo, bien sea con tierra, hidro o aéreo. Si eres principiante, lo mejor es iniciar con tierra.
Es recomendable utilizar sustrato de tierra, con unas 10 a 12 plantas por m2. Usa, por lo menos, dos macetas por cada planta. La primera debe ser un poco más pequeña, para el inicio del cultivo, mientras que la otra más grande para cuando vaya creciendo.
2. Escoge la mejor genética
Los novatos suelen preguntarse, ¿cuál tipo de variedad debo elegir si hay muchas? Por esa razón, te podemos decir que escojas semillas feminizadas, así te aseguras que todas las plantas serán hembras y te darán hermosos cogollos.
Ahora bien, tienes las plantas hembras, ¡bravo es un gran paso! Sin embargo, es momento de escoger la variedad de fácil cultivo. Existen dos opciones de variedades: Autoflorecientes o híbridos, consiste generalmente, entre la unión entre cannabis sativa e índicas.
¿Sabes cuáles son las semillas de marihuana autofloreciente? Significa que si la eliges para tu cultivo de cannabis en interior, estas florecerán según su edad. No tendrás necesidad de ser tan meticuloso con el proceso de fotoperíodo. De hecho, podrás cultivar entre 12 y 20 horas de luz al día, es decir, entre la germinación hasta la esperada cosecha.
Toca hablar de la segunda opción, los híbridos, es recomendable para aquellas personas que tienen pequeños armarios, donde la temperatura, a veces, es elevada y puede llegar a ser un problema.
Otro dato importante de esta variedad es que necesita 12 horas de oscuridad diaria, de esa manera comenzarán a florecer.
3. Es momento de elegir un buen sustrato
Un paso fundamental a la hora de cultivar marihuana en interior es el sustrato, puesto que ahí es a donde se cultivará. Existen varios como tierra, fibra de coco, lana de roca y arlita, aunque algunos suenen exótico, como mencionamos en el paso uno, es mejor que elijas tierra.
La tierra es el sustrato que tiene mayor éxito al momento de la cosecha. Tiene un porcentaje estable en la retención de agua y aire.
¿Necesitas otro beneficio? Ahí te viene, la tierra posee la habilidad de amortiguar posibles fallos en la aplicación de fertilizantes. Otra cosa, es que si buscas que tus plantas tengan el mejor aroma, sabor y color, la tierra podrá ayudarte con eso.
Si nos permites otro consejo, que será así porque esto aún no termina, es importante que tomes en consideración la tierra abonada, así tu planta no necesitará la adición de nutrientes extras, al menos, por tres semanas después del trasplante.
4. Instala el mejor kit de iluminación
A lo largo del artículo hemos mencionado el uso de lámparas, lo que equivale al kit de iluminación. Sabemos que el cultivo interior de marihuana requiere de iluminación artificial, esta debe ser capaz de sustituir la luz solar.
Por consiguiente, nada mejor que elegir el mejor kit de iluminación del mercado. En la primera fase puedes instalar bombillos de bajo consumo. Para la segunda etapa, la de crecimiento vegetativo, puedes optar por halagenuros metálicos, con espectro de luz fría.
En esa fase de floración y maduración, puedes adquirir bombillas con vapor de sodio y así darán mejor resultados.
Si no quieres comprar distintas bombillas, invierte en una de espectro mixto, verás que te servirá durante todas las fases del cultivo.
Anteriormente mencionamos que hay otro tipo de iluminación, algunas basadas en la tecnología Plasma, LED e inducción, sin embargo, dejamos esa decisión en tus manos.
Otra parte importante es, sin lugar a dudas, la cantidad de luz dependiendo de cada unidad de superficie que reciben las plantas. Es natural que se asigne una determinada potencia lumínica por cada metro cuadrado, claro, tomando en consideración la etapa en la que se encuentra la planta.
Como no queremos que pongas en práctica el “ensayo y error”, te decimos que como norma general, se instalan 200 vatios en la etapa de germinación y erraizamiento, mientras que en el crecimiento 400 varios y la floración 600.
5. Instala sistema de extracción
Supongo que sabes que para lograr que la planta de marihuana se desarrolle de forma correcta en un cultivo de interior, se necesita renovar el aire constantemente. ¿Cuál es el objetivo de la renovación? Que el calor generado por las bombillas no se aglomere en el espacio del cultivo, así asegurarás que tus plantas recibirán un suministro constante de dióxido de carbono.
Regresemos, por un momento, a las clases de Ciencias Naturales, ¿sabes cuál es el papel del CO2 en la planta? Se trata de una molécula fundamental, debido a que gracias a ella se realiza el proceso de fotosíntesis, sin ellas tus queridas plantas pueden dejar de crecer y florecer.
Existen distintos métodos para conseguir qué extractor es el indicado para una sala de cultivo interior de marihuana. Una fórmula básica es multiplicar el volumen de la sala en metros cúbicos, por 30, y este número te proporcionará el caudal mínimo que debe tener tu extractor.
Asimismo, necesitarás un intractor de caudal ligeramente inferior, ¿sabes por qué? Porque mantendrá una presión negativa en la sala.
Si sigues esos consejos, el aire siempre tendrá tendencia a salir por el extractor y también por el filtro de carbón, asegurando que el olor del cannabis quede totalmente neutralizado.
6. Regar con agua y nutrientes
Llegamos al paso final. Es el instante perfecto para hablar sobre el agua y los fertilizantes. Cuando más sea pura el agua, más oportunidad tendrá el cultivador de añadir fertilizantes. Aunque te recomendamos instalar un filtro de osmosis, de igual manera puedes hacer uso del agua de lluvia o comprar algunas garrafas o botellas.
¿No puedes recurrir a ninguna de estas opciones? Puedes recurrir a el agua del grifo, no obstante, es importante que conozcas si esa agua es dura o blanda.
Recuerda que de la dureza del agua hace referencia a su contenido en cal, en algunos casos también de magnesio. En el mercado hay una variedad de formulaciones de fertilizantes para el cultivo.
¿Te gustaron estos consejos? Sabemos que te serán de gran utilidad. Por los momentos nos despedimos. ¡Seguimos en contacto!